Esta playa es la más increíblemente preciosa que he visto en mucho tiempo. Esta muy bien cuidada, claro que hay que pagar 8 dolares para aparcar. Después de aparcar se baja el acantilado por unas escaleras y allí empiezan las vistas maravillosas del océano y demás bellezas de la naturaleza.
Es una playa llena de rocas gigantes en el agua con una especie de cuevas, la arena es fina y blanca y el agua azul profundo. Hay muchos delfines y pajaros de mar y apenas turistas.
Ya abajo el acantilado te protege del viento y crea un ambiente muy acogedor.
No se puede ni comparar con las demas playas de la zona y esta solo un poquito más hacia el norte de zuma beach y sus playas llenas de gente.
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